El Servicio de Mediación Familiar es un Servicio Social Público, especializado y consolidado en la Comunidad Foral. Desde su origen el Servicio de Mediación Familiar se ha llevado a cabo a través de una gestión mixta entre la Administración y Entidades privadas. Comenzó su andadura en el año 2001 y en 2019 se ha establecido como una prestación técnica garantizada del Sistema Público de Servicios Sociales.
De los casos que se trabajan en el Servicio, aunque este dato suele variar anualmente, se puede generalizar afirmando que, el 90% de los casos son de ruptura de pareja, repartiéndose el 10% restante en casos de: modificaciones de medidas y grupo familiar.
La mediación trata de facilitar un espacio a las personas en conflicto, donde sea posible hablar y sentir que son escuchadas, donde sea posible la comprensión mutua de todas las razones, motivos, intereses y necesidades de cada uno de los miembros del sistema familiar.
Habitualmente no se trae a los hijos e hijas a la mediación, porque se parte de que las decisiones las toman los adultos, pero tanto las hijas como los hijos están muy “presentes” durante el proceso para sus progenitores y si no es así, ésta será una meta por conseguir por parte de la persona mediadora.